Centrarse en la cultura organizacional es muy importante porque es como el ADN de cómo funcionan las cosas en una empresa. ¡Todo tiene que ver con el ambiente! Una cultura sólida hace que los empleados se sientan valorados y felices, lo que es muy importante para mantenerlos motivados. Además, es un imán para los mejores talentos y, en el mercado laboral actual, eso es muy importante. Cuando tienes una cultura que se basa en la comunicación abierta y la creatividad, es como plantar semillas para que crezcan ideas increíbles.
Sí, es bastante simple de ver: una cultura empresarial positiva es el secreto del éxito.
¿Qué tipos de culturas empresariales existen?
La cultura de una empresa puede variar significativamente según factores como la industria, el tamaño, el enfoque de liderazgo, los valores y la ubicación geográfica. Por lo tanto, en lugar de intentar resumir todas las diferentes culturas potenciales, reunámonos y echemos un vistazo al Instrumento de Evaluación de la Cultura Organizacional (OCAI) creado por Cameron y Quinn. Este instrumento identifica cuatro tipos de culturas dentro de las organizaciones, utilizando el marco de valores en competencia como base:
Cultura de clan (flexible/centrada en lo interno)
Imagina trabajar en un lugar que se siente como una segunda familia. Eso es lo que se conoce como cultura de clan. Se trata de trabajar en equipo, conocer las opiniones de todos y tomar decisiones en conjunto. Los líderes son más como mentores o entrenadores, y se hace mucho hincapié en asegurarse de que todos se sientan apoyados y valorados. La comunicación es abierta, todos se respetan y uno se siente como si fuera parte de un grupo muy unido.
Si le preguntaras a una empresa de cultura de clanes cómo llevan a cabo sus negocios, podría sonar algo así:
“En la Compañía A somos como una familia. Durante nuestras sesiones semanales de intercambio de ideas, todos colaboramos y nos apoyamos mutuamente en las buenas y en las malas. Cuando surgió un desafío para un cliente, nos unimos y encontramos una solución innovadora que fortaleció nuestro vínculo como un clan muy unido”.
Cultura de adhocracia (flexible/centrada en lo externo)
Aquí es donde la creatividad y la innovación toman protagonismo. Si te encanta generar nuevas ideas, asumir riesgos y cambiar las cosas constantemente, la cultura de la adhocracia es lo tuyo. Las organizaciones con esta cultura siempre buscan ser las primeras en nuevos desarrollos, lo que fomenta el pensamiento innovador. El liderazgo consiste en inspirar el cambio y traspasar los límites. Es un lugar donde las reglas se pueden romper en nombre de la innovación.
Entonces, si quisieras preguntarle a una empresa con cultura adhocrática cómo hacen las cosas, probablemente sería algo como esto:
“En la Compañía B, nos gusta pensar de manera creativa. Cuando nuestro competidor lanzó una idea revolucionaria, no perdimos el ritmo. Organizamos sesiones de lluvia de ideas improvisadas y ¡boom! Se nos ocurrió una idea revolucionaria que nos puso por delante en el juego”.
Cultura jerárquica (estable/centrada en lo externo)
Aquí, todo es cuestión de estructura y orden. Piensa en roles claros, procesos específicos y amor por la estabilidad y la eficiencia. Si valoras saber exactamente lo que se espera de ti, con caminos y procedimientos bien definidos, encajarás perfectamente. Los líderes actúan en roles gerenciales tradicionales, concentrándose en mantener todo funcionando sin problemas. Las decisiones generalmente vienen de arriba hacia abajo y se hace mucho hincapié en la constancia y la precisión.
¿Alguna vez te preguntaste cómo funciona una cultura jerárquica en una empresa? Bueno, si les preguntas, es probable que la respuesta sea algo así:
“La empresa C funciona como un reloj. Cuando nuestro envío se retrasó, no hubo problemas. Seguimos nuestros protocolos al pie de la letra, hicimos que todo funcionara sin problemas y no nos saltamos ningún detalle. Así es como trabajamos: estructurados, eficientes y confiables”.
Cultura de mercado (estable/centrada internamente)
Ahora bien, si lo que buscas es alcanzar objetivos y superar a la competencia, la cultura de mercado es lo que importa. Esta cultura se centra en los resultados y el rendimiento. Las organizaciones con una mentalidad de mercado se esfuerzan por ser las mejores, priorizan los logros y, a menudo, fomentan un entorno competitivo. El liderazgo consiste en ser decisivo y estar orientado a los objetivos, siempre con la vista puesta en el premio, ya sea la participación en el mercado, los ingresos o ser el número uno.
Si tienes curiosidad sobre cómo una empresa con cultura de mercado logra hacer las cosas, aquí tienes un adelanto de lo que podrían decir:
“En la Compañía D, lo que nos interesa es ganar. Por eso, cuando un competidor intentó meterse con nuestra participación de mercado, no lo toleramos. Nos pusimos en marcha, aplicamos todas nuestras estrategias y, ¿adivinen qué? No solo nos mantuvimos firmes, sino que salimos aún más fortalecidos”.
¿Las empresas reales realmente siguen este tipo de culturas?
Está bien que les demos ejemplos ficticios de estas culturas, pero ¿qué pasa con las de la vida real? Sí, estas culturas no son solo teorías sobre el papel; muchas empresas adoptan los diferentes tipos.
A continuación, analizaremos distintas empresas y cómo adoptan distintas culturas. Además, no te sorprenda si ves algunas de las mismas empresas en distintas categorías. Algunas de ellas son gigantes de la industria, lo que significa que sus distintas áreas de funcionamiento pueden tener una cultura diferente. No olvides que algunas de ellas pueden haber tenido una determinada cultura antes de ser absorbidas por una nueva dirección con nuevas ideas.
¡Entremos en esto!
Ejemplos de cultura de clanes en la vida real
1. Zappos
En Zappos, lo que buscan es construir una familia y una cultura empresarial. Esta actitud se refleja en todo lo que hacen, desde su exclusivo proceso de contratación hasta su enfoque de gestión (o deberíamos decir, su falta de él). Dejaron de lado la jerarquía tradicional por algo llamado "holacracia", que es básicamente una forma elegante de decir que todos tienen voz y voto en cómo se gestionan las cosas.
La idea es hacer que el lugar de trabajo se sienta más como una comunidad, donde todos se apoyan entre sí y se divierten haciéndolo. Y funciona: Zappos es conocido por su increíble servicio al cliente y sus empleados felices.
2. Google
Google prácticamente se ha convertido en sinónimo de un lugar de trabajo genial. Pero no se trata solo de comidas gratis y toboganes en la oficina. Google realmente quiere que sus empleados y clientes se sientan parte de una gran familia innovadora. Trabajan en proyectos en equipo y, a menudo, deciden juntos la mejor manera de abordar los problemas. ¡Hablamos de crear un lugar de trabajo inclusivo! Esta sensación de colaboración y libertad para innovar es lo que mantiene a Google a la vanguardia. Además, ¿saber que en tu lugar de trabajo se preocupan tanto por tu felicidad como por sus productos? Eso es bastante especial.
3. Patagonia
Patagonia es más que una empresa de ropa para actividades al aire libre; es una causa. Todos los que trabajan allí comparten una profunda pasión por el medio ambiente y la sostenibilidad. Son camaradas de armas que luchan juntos por el bien del medio ambiente. Patagonia respalda esto al involucrarse en el activismo ambiental y asegurarse de que sus empleados también puedan hacerlo, ofreciendo licencias pagas para protestas y trabajo voluntario.
Patagonia ha demostrado aquí que crear la mejor cultura no siempre se reduce a beneficios divertidos y bocadillos.
4. Southwest Airlines
Si alguna vez volaste con Southwest, es posible que hayas notado algo diferente en la forma en que hacen las cosas. Hay una sensación de diversión y calidez que impregna todo, desde la forma en que te saludan al abordar el avión hasta cómo bromean durante las instrucciones de seguridad. Esto se debe a que Southwest opera como una gran familia feliz, donde se alienta a todos a cuidarse unos a otros y a no tomarse la vida demasiado en serio. Esta filosofía les ha ganado no solo empleados leales, sino también clientes leales, lo que demuestra que un poco de amabilidad ayuda mucho.
5. Warby Parker
Warby Parker está haciendo las cosas de manera diferente en la industria de las gafas, y eso incluye la forma en que tratan a sus empleados. Es un lugar donde todos sienten que son parte de algo más grande, trabajando juntos no solo para vender gafas, sino para hacer del mundo un lugar mejor. Su programa "Compra un par, regala un par" es un reflejo (en las gafas) de sus valores fundamentales, compartidos por todos en la empresa. Este sentido de propósito y trabajo en equipo hace que Warby Parker no solo sea un gran lugar para trabajar, sino una empresa a la que los clientes se sienten bien al apoyar.
6. Netflix
En Netflix, las cosas son un poco diferentes, en el buen sentido. Han dejado de lado las reglas tradicionales y han optado por algo que llaman "libertad y responsabilidad". Básicamente, confían plenamente en los miembros de su equipo y les dan las riendas para que tomen decisiones y cambien las cosas. Este enfoque ha creado una cultura en la que todos se sienten empoderados, lo que fomenta un sentido de pertenencia e innovación.
Netflix se asegura de que sus empleados sepan que son valorados no solo por el trabajo que hacen, sino también por las ideas que aportan. Y con beneficios que enfatizan el equilibrio entre el trabajo y la vida personal y el crecimiento personal, queda claro que Netflix se preocupa profundamente por su equipo, creando un ambiente que se parece más a un grupo cercano de amigos que a un grupo de colegas.
Ejemplos de cultura adhocrática en la vida real
7. Google
Volvemos a hablar de Google. ¿No creías que una empresa tan grande y multifacética como Google se centra únicamente en una cultura para todos sus productos y áreas de innovación?
En Google, la cultura de la adhocracia fomenta un entorno en el que la innovación y la creatividad no sólo se fomentan, sino que son una forma de vida. La política del "20% del tiempo", un sello distintivo de esta cultura, otorga a los empleados la libertad de dedicar un día a la semana a realizar proyectos ajenos a sus principales responsabilidades laborales.
Esta política ha llevado al desarrollo de algunos de los productos más famosos de Google, como Gmail y AdSense. La idea es simple pero revolucionaria: cuando confías en tus empleados para que administren su tiempo y sigan sus pasiones, pueden surgir innovaciones revolucionarias. Este enfoque no solo fomenta un fuerte sentido de pertenencia y compromiso entre los miembros del equipo, sino que también mantiene a Google a la vanguardia de la tecnología.
8. Spotify
Imagina Spotify como un gran edificio lleno de un montón de pequeñas empresas emergentes, cada una tocando su propio ritmo. Esa es su onda adhocrática. Tienen estos pequeños equipos autogestionados, llamados escuadrones, que manejan diferentes porciones del pastel de Spotify, desde listas de reproducción hasta ajustes tecnológicos. Esta configuración les permite moverse rápido, probar cosas nuevas y cambiar de rumbo más rápido de lo que puedes saltarte una pista. Es como si cada escuadrón tuviera luz verde para innovar sin un laberinto de burocracia que los frene. Esta libertad mantiene a Spotify en la cima de las listas en el mundo del streaming de música, siempre un ritmo por delante del resto.
9. Valve Corporation
La forma de hacer las cosas de Valve es como la exploración de mundo abierto que crean los videojuegos: no hay caminos establecidos, solo posibilidades infinitas. No hay un jefe que te diga en qué proyecto trabajar; simplemente gravitas hacia cualquier juego o idea que despierte tu interés. Tampoco hay títulos oficiales dentro de la empresa. Este enfoque de creación de cultura ha dado lugar a algunos de los juegos más geniales que existen. Valve demuestra que cuando dejas que la gente inteligente persiga lo que le apasiona, surge la magia. Allí, el mundo es plano, donde triunfan las buenas ideas, no solo las de la gente con los títulos más elegantes.
10. Amazon
En Amazon, es como si cada uno tuviera su propio laboratorio para crear el próximo gran producto. La innovación y la obsesión por el cliente son la clave. Se trata de probar cosas nuevas, sabiendo muy bien que no todos los experimentos van a ser un éxito. Los equipos pequeños se mueven a toda velocidad, toman decisiones rápido, todo para asegurarse de que nos están dando lo que queremos antes de que sepamos que lo queremos. Desde libros hasta inteligencia artificial, la cultura de adhocracia de Amazon los mantiene a la vanguardia en el maratón de la innovación, al tiempo que mejoran constantemente su cultura de empresa.
11. NASA
En la época en que la NASA se dedicaba a poner tropas en la Luna, eran la máxima expresión de la adhocracia en acción. Tenían un único objetivo descabellado y un grupo de equipos capacitados para hacerlo realidad. Imagínate que les dijeran: "Bien, busquen una manera de llevar a una persona a la Luna. ¡Adelante!". Eso es exactamente lo que hicieron. La flexibilidad, la innovación y la rápida resolución de problemas dieron lugar a un gran salto para la humanidad. La cultura de la era Apolo de la NASA se basaba en soñar en grande, con un objetivo claro y la libertad de perseguirlo.
Ejemplos de cultura jerárquica en la vida real
Hoy en día, la palabra “jerarquía” suele recibirse con algún tipo de negatividad inicial, especialmente en el mundo de los negocios.
Por supuesto, una estructura jerárquica tradicional tiene sus ventajas: hay que pensar en estabilidad y en una cadena de mando clara, pero no todo es color de rosa. Este tipo de estructura puede ser bastante rígida, lo que puede frenar las nuevas ideas y hacer que la toma de decisiones tarde una eternidad. Por eso, algunas empresas están empezando a cambiar las cosas y a inclinarse por un estilo más descentralizado y que se adapte a la situación. Apuestan a que, al hacer las cosas de esta manera, pueden generar una innovación más rápida, conseguir que sus equipos se involucren más y reaccionar con mayor rapidez cuando el mercado les lanza una bola curva.
Cuando Ricardo Semler tomó las riendas de Semco Partners, cambió por completo la forma de hacer las cosas. Atrás quedaron los días de la gestión tradicional, de arriba hacia abajo. La empresa estaba un poco estancada y no le iba muy bien, así que a finales de los 80 y principios de los 90, Semler decidió que era hora de hacer un gran cambio.
Se deshizo de la rígida jerarquía que existía y la cambió por algo mucho más democrático y práctico para todos los involucrados. Esta nueva configuración tenía como objetivo dar a los empleados más libertad, hacerlos sentir responsables de su trabajo y permitirles opinar sobre las decisiones importantes. ¿Y adivina qué? Funcionó de maravilla. Semco se volvió más flexible, creativa e innovadora, lo que no solo impulsó la productividad, sino que también hizo que los empleados estuvieran mucho más felices.
Pero, por supuesto, todavía hay muchos lugares grandes y establecidos que se aferran a las viejas formas porque necesitan esa base sólida e inquebrantable para que las cosas funcionen sin problemas.
Algunos ejemplos incluyen:
12. IBM
IBM siempre ha sido un pionero en el mundo de la tecnología, famoso por mantener las cosas organizadas con su enfoque de arriba hacia abajo. Este tipo de configuración ayuda a IBM a mantenerse al día en todo el mundo, asegurándose de que puedan llevar a cabo grandes proyectos y ofrecer soluciones tecnológicas complejas a sus clientes sin problemas. Se trata de tener un plan de juego y saber quién toma las decisiones, lo que es muy útil cuando te sumerges en cosas interesantes como la computación cuántica y la inteligencia artificial. Tienen este don para asegurarse de que incluso las ideas más extravagantes cobren vida de una manera elegante y metódica.
13. McDonald's
Por otro lado, McDonald's tiene el juego de la comida rápida bajo control gracias a su propia visión de la cultura jerárquica. Esta configuración es la "salsa secreta" que se esconde tras la que se asegura de que tu Big Mac tenga el mismo sabor en Tokio que en Texas. Se trata de hacer que las cosas funcionen como un reloj, desde la rapidez con la que recibes las patatas fritas hasta mantener ese clásico sabor constante. Además, este enfoque les permite implementar grandes cambios, ya sea retocando el menú o volviéndose más ecológicos, con el tipo de precisión que esperarías de una máquina bien engrasada.
14. Ford
La historia de Ford no es muy diferente en lo que se refiere a la importancia de un buen orden jerárquico. Esto les ha ayudado a mantener la fluidez en la línea de montaje y a adaptarse a la montaña rusa de la industria. En Ford, lo importante es ceñirse al manual y tomar decisiones a través de los canales adecuados, lo que ha sido de gran ayuda a medida que cambian de marcha hacia la escena de los vehículos eléctricos. Este enfoque en el orden y la eficiencia es lo que los ha mantenido en la carrera, asegurándose de que siempre estén listos para afrontar lo que venga después con estilo.
Ejemplos de cultura de mercado en la vida real
15. Apple Inc.
Este gigante tecnológico vive y respira una mentalidad de mercado. Piensa en iPhones de última generación y elegantes MacBooks que marcan tendencia. Bajo el liderazgo de Steve Jobs, Apple se centraba en ser el mejor, en fabricar productos que no fueran solo aparatos, sino que fueran una declaración de moda. Su filosofía era (y sigue siendo) liderar el grupo y ser el número uno. El juego de Apple es la innovación, la experiencia del usuario y, seamos honestos, hacerte sentir genial. ¿Ese esfuerzo incansable por encabezar las listas? Pura cultura de mercado en acción.
16. Amazon
Amazon es como el rey de la jungla minorista, que explora y conquista constantemente nuevos territorios. Jeff Bezos convirtió a Amazon de una librería en un emporio en línea que lo hace todo. El secreto de Amazon radica en obsesionarse con los clientes, entrar en nuevos mercados y nunca tener miedo de cambiar las cosas. Reinvierten cada centavo para crecer más, desde el comercio minorista hasta la computación en la nube. Su mantra: mantener a los clientes felices y a la competencia alerta. Se trata de dominar el mercado, una entrega Prime a la vez.
17. Walmart
Walmart es el pez gordo del mercado minorista, conocido por sus precios imbatibles. ¿Cómo? Centrándose en una escala masiva y ahorrando dinero siempre que sea posible. Esta estrategia ha convertido a Walmart en un nombre conocido en todo el mundo. Su objetivo es ofrecer más por cada dólar invertido y mantener a la competencia en la lucha. La estrategia de Walmart es sencilla: reducir los costes, mantener los precios bajos y ver cómo llegan los clientes. Es un ejemplo clásico de cultura de mercado, dominada por ser la opción más barata de la ciudad.
18. Nike
Nike se centra en ganar, ya sea en el campo deportivo o en el mercado. Su estrategia se centra en un marketing estelar, productos de primera categoría y en conseguir que las mayores estrellas del deporte digan "Just Do It" . Este afán por ser los mejores los ha convertido en la marca de referencia tanto para los deportistas como para los adictos al sofá. Dentro de Nike, es como una carrera constante para superarse a sí mismos y a los demás, lo que demuestra que su mentalidad de mercado no es solo palabrería; es la forma en que avanzan a toda velocidad.
19. Goldman Sachs Group
En el mundo de las finanzas, en el que las apuestas son altas, Goldman Sachs juega para ganar. Este gigante bancario se esfuerza por estar un paso por delante y siempre busca el estatus de líder. Su cultura se basa en la excelencia, en hacer grandes movimientos y en hacer que los clientes vuelvan en busca de más. En Goldman, el objetivo es ser los mejores negociadores. Esta búsqueda incesante del éxito y la influencia es la cultura del mercado en su forma más pura: edición altas finanzas.
20. Tesla
Tesla, bajo la dirección de Elon Musk, es una revolución sobre ruedas. Revolucionó la industria automotriz y convirtió los autos eléctricos no solo en viables, sino también deseables. El mantra de Tesla es la innovación, superar los límites y no conformarse con el segundo puesto. Su enfoque consiste en movimientos audaces, grandes promesas y autos que parecen del futuro. A través de estos métodos, Tesla ha cambiado por completo la forma en que pensamos sobre el transporte.
¡Imagínate decirle a alguien en los años 50 que los coches eléctricos serían el camino del futuro!
¿Esa ambición de conducir (nunca mejor dicho) el futuro? Es una mentalidad de mercado de pies a cabeza.
No importa qué cultura empresarial tengas, ¡nunca subestimes los retiros empresariales!
Ya sea que se trate de una empresa obsesionada con la cultura del mercado o de un equipo más relajado y ad hoc, siempre necesitarás encontrar tiempo para relajarte, no solo para ti sino también para todo el equipo. Piensa en tomar un cóctel por la noche después de un día de trabajo en equipo en la playa o en una comida de equipo bien merecida después de caminar por el bosque todo el día.
Suena genial, ¿verdad? Pero, ¿quién en este mundo tiene tiempo para planificar una excursión así? ¡Apostamos a que tú no!
Bueno, aquí es donde entra Surf Office.
Surf Office ha tenido el placer de organizar más de 700 experiencias de retiro, incluidos equipos remotos, para muchas empresas diferentes. Esto es lo que ofrecemos:
- ¿Traslados sin estrés? ¡Te tenemos cubierto! ✅
- ¿Alojamiento con garantía de calidad? ¡Listo! ✅
- Atractivasactividades de team-building? Nuestra especialidad ✅
- ¿Reservas en restaurantes? ¡Eso corre por nuestra cuenta! ✅
- ¿Asistencia experta para la planificación de retiros? ¡Por supuesto que lo tenemos cubierto! ✅
- ¿Soporte en el sitio adaptado a tus necesidades? Por supuesto ✅
No solo esto, sino que también tenemos acceso a más de 150 ubicaciones en Europa, APAC, EE. UU. y ahora América Latina, lo que significa que el cielo es tu límite cuando se trata de elegir la ubicación adecuada para ti y tu equipo.
Reserva ahora , ¡las plazas son limitadas!